Indagando sobre los posibles orígenes de la actual hermandad y de la procesión del domingo de Ramos, encontramos que la tradición de las Palmas, figuraba ya en el Catastro que mando realizar el Marqués de la Ensenada allá por el año 1752. Según documentación consulada en referencia al tema, podemos afirmar que el Ayuntamiento de Villanueva del Arzobispo destinaba cierta cantidad de dinero para la fiesta del Domingo de Ramos
Pasan los años y los siguientes testimonios que encontramos de la Cofradía son diferentes publicaciones que indican que durante el siglo XIX y los primero años del XX, se celebraba una procesión de forma viviente que partía del tempo mayor de la ciudad, la Iglesia Parroquial de SAN ANDRES APOSTOL. Nuestro cronista oficial D. Manuel López Fernández narra dicho acto del siguiente modo, en referencia a la procesión celebrada en el año 1949, en su pregón del año 2003: “Iniciaban la marcha la Cruz Parroquial y los niños y niñas de las escuelas nacionales, colegio de Religiosas, niños del internado de la Sagrada Familia y Graduada de la misma institución. Todos los grupos de alumnos llevaban al frente sus respectivos maestros.
Cerraba la vistosa procesión un cuadro plástico compuesto por cincuenta y tres niños y niñas vestidos a la usanza hebrea, los Doce Apóstoles, la Samaritana, Lázaro, y el paralítico con sus muletas. En el centro, montado en su borriquilla, Jesús representado por el niño Ignacio Román.
En el afán de consolidar dicha tradición, y buscando oficializar la misma, se promueve la creación de una asociación cristiana que entorno a la figura de Jesús y con la entrada triunfal en Jerusalén como advocación , predicase el Evangelio cada Domingo de ramos en nuestra ciudad. La Hermandad entronco en principio en clara relación con el gremio de la enseñanza, niños y maestros se dieron la mano en la creación de la Cofradía Nuestro Padre Jesús entrando en Jerusalén. Durante los primeros años de la década de los cincuenta del pasado siglo, los maestros siguen trabajando en la puesta en marcha de nuestra cofradía, así el día quince de enero de mil novecientos cincuenta en el desaparecido teatro Martin, se celebro una función benéfica para la adquisición de la imagen.
El impulso de la Hermanandad lo comparte todo el Magisterio de la localidad junto al sacerdote D. Carmelo Iribar, aunque posteriormente se responsabilizan solamente las Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia. Caben destacar las figuras tanto del primer presidente D. Juan Avilés como la de D. Pascual Megina, incansables trabajadores en las tareas de organización de la Cofradía.
Los primeros estatutos de nuestra Hermandad se redactan y firman el día 10 de noviembre de 1955.
La túnica oficial quedaría compuesta por una sotana color verde con botonadura dorada, capuchón o antifaz y fajín de la misma tela del forro de los botones. La capa será de color blanco, siendo facilitada por la cofradía y sufragada por los hermanos en pequeñas cuotas como así se recoge en un documento fechado en 1961.
